México se encuentra en un momento crucial en su política energética, con una serie de reformas que buscan redefinir el papel del Estado y del sector privado en la generación de electricidad. La energía solar, una de las fuentes renovables con mayor potencial en el país, se ha convertido en un tema clave en estos cambios legislativos. En este artículo, exploramos las principales modificaciones propuestas y su impacto en la industria solar mexicana.
1. Participación del Estado en la Generación Eléctrica
La reforma constitucional de octubre de 2024 modificó los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución, otorgando al Estado la responsabilidad de la transición energética hacia fuentes renovables. Esta medida refuerza el papel de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en la generación eléctrica, asegurando que la empresa pública mantenga una posición predominante en el sector.
Con esta reforma, la CFE tendrá mayor control sobre la generación de electricidad renovable, incluyendo la solar, lo que podría limitar la entrada de nuevos proyectos privados o, por el contrario, generar condiciones más favorables para asociaciones estratégicas con la iniciativa privada.

2. Apertura a la Inversión Privada en Energías Renovables
A pesar de fortalecer el control estatal, el gobierno de Claudia Sheinbaum ha lanzado el Plan Nacional de Energía, que busca incrementar la participación de energías limpias en la matriz energética. Este plan contempla la colaboración con el sector privado bajo reglas claras, facilitando la inversión en proyectos de energía solar y otras fuentes renovables.
Esto representa una oportunidad para el crecimiento del sector solar en México, ya que los inversionistas nacionales e internacionales podrían participar en el desarrollo de plantas solares a gran escala, garantizando precios competitivos y fomentando la innovación tecnológica en el sector.
3. Incremento en la Capacidad de Generación Renovable
Entre 2025 y 2030, el gobierno mexicano planea aumentar la generación eléctrica en 27,000 megawatts, con un enfoque en energías renovables como la solar. Este esfuerzo busca aprovechar el alto potencial solar del país y reducir la dependencia de combustibles fósiles.
Este crecimiento en la capacidad instalada de energías renovables podría traducirse en incentivos adicionales para empresas y hogares que deseen adoptar tecnología fotovoltaica, beneficiándose de costos de producción más bajos y una infraestructura más robusta.
4. Potencial Solar de México
México posee una irradiación solar promedio de 6.36 kWh/m² al día, una de las más altas del mundo, lo que convierte al 85% del territorio nacional en idóneo para proyectos solares. Las reformas buscan capitalizar este potencial, promoviendo la instalación de paneles solares y el desarrollo de infraestructura relacionada.
La transición hacia una mayor proporción de energía solar en la matriz energética nacional permitirá a México reducir sus emisiones de carbono, avanzar en sus compromisos internacionales en materia de cambio climático y mejorar la independencia energética del país.
Conclusión
Las reformas energéticas recientes en México buscan equilibrar el fortalecimiento de las empresas estatales con la promoción de inversiones privadas en energías renovables. Estas medidas pretenden aprovechar el vasto potencial solar del país, impulsando proyectos que contribuyan a una matriz energética más limpia y sostenible.
El sector solar en México tiene una gran oportunidad de expansión gracias a estas reformas, pero también enfrenta desafíos en la regulación y competencia con la CFE. Será crucial seguir de cerca la implementación de estas políticas y cómo impactarán en el desarrollo de la energía solar en los próximos años.
Fuentes: